Tener un gran número de cuentas bancarias en México, no es reflejo de un avance en la inclusión financiera, dijo Gerardo Esquivel, exsubgobernador de Banco de México (Banxico).
“Que mucha gente tenga acceso a cuentas bancarias está bien, pero es insuficiente”, aseguró Esquivel, al participar en el Foro Nacional: Finanzas + incluyentes. Acciones para impulsar la competencia en el sector bancario, organizado por INTELI-IURIS, y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El desarrollo financiero tiene que ver con que la gente tenga un instrumento bancario de ahorro, el cual, entre otras cosas, le permitirá acceder a otros productos, como un préstamo para invertir, consideró el exsubgobernador.
Explicó que para avanzar en el tema de la inclusión financiera, es necesario mejorar la educación en este rubro.
Entre mayor sea el entendimiento de los beneficios y riesgos de los productos del sector financiero, “podrán hacer un uso más eficiente de este”, aseguró Gerardo Esquivel.
“La banca en México está bien. Tiene todos sus indicadores a salvo -capitalización, liquidez, bajos índices de morosidad, entre otros-, pero un rasgo estructural que ha caracterizado al sistema mexicano sigue vigente: baja profundización financiera y muy bajo otorgamiento de créditos al sector productivo”, lamentó Enrique Provencio, director del Programa Universitario de Estudios del Desarrollo de la UNAM.
Hablando de crédito, agregó, obedece a dos razones: la oferta de crédito y la demanda por este producto.
Durante su intervención, Mariana Campos, directora de México Evalúa, señaló que el desarrollo del sistema financiero: ahorro, créditos, entre otros, están asociados con el crecimiento económico.
Por lo que el desarrollo financiero puede aumentar hasta en 14% el Producto Interno Bruto (PIB), de acuerdo con datos de la consultora EY. «Esto, por ende, tiene un impacto en la recaudación”, dijo Campos.
De acuerdo con la secretaría de Hacienda, cada punto porcentual del PIB equivale a 50,000 millones de pesos (mdp) más, detalló Campos.
“Más allá de saber qué es el costo anual total, una tasa de interés nominal porque el sistema bancario no es cualquier cosa. Los ahorradores deben entender los beneficios y los riesgos (…) Tenemos que ampliar los otros instrumentos, sobre todo el crédito porque es lo que nos va a permitir que los agentes económicos quieran invertir, esa es la salida ”, agregó Esquivel.
Leonardo Wester dos Santos, jefe del sector económico de la Embajada de Brasil en México, consideró que el open finance será de gran ayuda para lograr esta meta en México, tal como ocurrió en Brasil.
Bancos digitales tienen retos
La banca digital es una oportunidad para que haya una mayor penetración de la banca en la población.
Entre los retos que aún se enfrentan, agregó, está la apertura de cuentas, pues actualmente aún se tiene que acudir a un espacio físico para completar este proceso.
También hace falta contar con un documento de identificación digital, algo en lo que se ha avanzado, pero no se ha concretado.
El avance tecnológico trae consigo un reto para las autoridades, dijo Jesús de la Fuente, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, al tiempo de señalar que la regulación ha tenido que responder para estar a la altura de los cambios para supervisar a los nuevos jugadores del mercado y a los nuevos procedimientos, haciendo referencia a las fintech y la digitalización.
Adiós al efectivo
México busca reducir el uso de dinero en efectivo, así como una mayor penetración del crédito.
Algo que hizo Brasil a través de Pix, método de pago instantáneo que funciona a través del teléfono celular “Hay economistas que dicen en Brasil que dicen que está por terminar el uso de efectivo, por el fenómeno de Pix”, dijo Leonardo Wester dos Santos.
“Datos del año pasado, indican que más de 72 millones de personas fueron incluidas al sistema financiero brasileño después de la implementación de Pix. Son más de 160 millones de usuarios, casi toda la población adulta de Brasil. En un mes suman más de 6,000 mdp mexicanos”, operados a través de este sistema de pagos, subrayó.
En México, recordó Gerardo Esquivel, Banco de México ha hecho esfuerzos por fomentar los métodos digitales de pago.
Desde el sistema de pagos electrónicos interbancarios (SPEI) hasta Dinero Móvil (Dimo), para hacer transferencias solo con el número telefónico del destinatario. Sin embargo, lamentó, no han tenido la penetración que se esperaba.
Por último, dijo el ex gobernador del banco central, se necesita coordinar todos los esfuerzos para encaminarlos en el mismo sentido y en la misma dirección. Ya que en México diversas autoridades han promovido desde su trinchera la inclusión financiera, pero no ha habido coordinación.
Fuente: Expansión