
México enfrentará contracción económica en 2025 y crecimiento mínimo en 2026, según BNP Paribas
La incertidumbre jurídica y los cambios en las reglas del juego podrían llevar a una contracción económica en México en 2025, seguida de un crecimiento casi nulo en 2026, advierte Pamela Díaz Loubet, economista en jefe de BNP Paribas en México.
De acuerdo con las perspectivas del banco, el país registraría una caída del 0.3% en 2025 y un leve repunte del 0.2% en 2026. “Aún es pronto para descartar una recesión; debemos esperar los datos de la segunda mitad del año, que apuntan a debilidad en la actividad económica”, señala Díaz Loubet en entrevista con Forbes México.
Aunque los resultados del segundo trimestre superaron las expectativas y mostraron una mejora frente al primer trimestre de 2025, la economista advierte que los datos han sido distorsionados por la guerra de aranceles impulsada por Donald Trump. Por ejemplo, el repunte en las exportaciones mexicanas podría deberse a envíos anticipados para evitar los gravámenes.
Desaceleración gradual y debilidad en indicadores
El Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) y el Indicador Oportuno (IOAE) sugieren un crecimiento moderado en el segundo trimestre, pero inferior al del primer trimestre. “Poco a poco se consolida la desaceleración”, afirma Díaz Loubet.
Entre los signos preocupantes destacan:
- Empleo: Aunque la tasa de desempleo sigue baja (según la ENOE), la creación de empleo formal en 2025 está por debajo de los promedios históricos.
- Manufacturas: Los índices IMEF (tanto manufacturero como no manufacturero) llevan meses en zona contractiva.
El “nearshoring” en pausa
La inversión privada, que representó el 21.9% del PIB en 2024, cayó al 21% en el primer trimestre de 2025. “Es una disminución moderada, pero confirma que el impulso del nearshoring se ha detenido”, explica la experta. Agrega que, aunque hubo señales previas de que este fenómeno se materializaba (como el aumento de inversión extranjera directa y las importaciones de bienes de capital), ahora enfrenta obstáculos.
Factores internos y externos
La incertidumbre no solo proviene de la tensión comercial con Estados Unidos y la revisión pendiente del TMEC, sino también de reformas constitucionales recientes en México. “Este año ha sido complejo por los cambios internos que alteraron las reglas del juego”, destaca Díaz Loubet.
La reactivación del nearshoring dependerá, en gran medida, de cómo se resuelvan estos factores: “No habrá avances significativos hasta que se defina el futuro del TMEC”, concluye.