La propuesta de Paquete Económico 2023 deja en el olvido el bienestar de los más jóvenes y las nuevas generaciones al destinar una mayor proporción de recursos del presupuesto público a pensiones , frente a recursos para la niñez y la juventud, y emitiendo más deuda sin impulsar alguna reforma para mejorar la recaudación de ingresos tributarios, ni mayores recursos para la inversión e impulsar la economía.
«Si habláramos de ganadores y perdedores en el Paquete Económico, los adultos mayores serían los primeros, mientras las primeras infancias, niños, niñas y jóvenes podrían estar un poco olvidados, pues hay menos presupuesto para cuidados de la salud, salud, educación, mientras para pensiones hay mayor gasto», comentó este lunes Alejandra Macías, directora ejecutiva del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
De acuerdo con un análisis al Paquete Económico 2023 del CIEP, el 0.25% del gasto público se destinará a la atención para primera infancia, mientras que para pensiones se destinará 19.8% del total del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).
Los gastos para la atención a la población adulta mayor aumentarán 12.8%, mientras que el gasto para Educación solo crecerá 4.5% respecto a 2022, en Salud el gasto subirá 4.2% lo que ayudaría incrementar el gasto per cápita en IMSS, ISSSTE y Pemex, pero el gasto para la población sin servicios de salud se reduciría en 2.1%.
Más deuda para las nuevas generaciones
En tanto, para el siguiente año se prevé un pago por deuda pública en 1.2 billones de pesos (bdp), de ingresos totales proyectados en 8.3 bdp que representa un crecimiento de 30% en términos reales, frente a 2022, explicó por su parte Ricardo Cantú, director adjunto de Operaciones y Fortalecimiento Institucional del CIEP.
Eso en términos per cápita representa un incremento de 114,574 pesos a 118,208 pesos en 2023, por cada ciudadano, si se mantiene la tendencia en el crecimiento del costo de la deuda en 2028, puede incrementarse a 128,155 pesos por ciudadano, estimó Cantú.
Se prevé que el crecimiento de la deuda respecto al PIB se mantenga en los próximos años, y la única forma de revertirse es incrementando el gasto en inversión que impulsa la economía, no obstante, pese a que este concepto para el siguiente año crece 15.6% respecto a 2022, este es menor en 9.5% respecto al ejercido en 2021.
«Las crecientes presiones en el gasto público y la constante disminución de personas en edades de trabajar; derivado de la transición demográfica, acentúan la importancia de realizar ajustes entre recaudación y compromisos ineludibles para satisfacer las necesidades presentes y futuras de la población «, dijo director adjunto de Operaciones y Fortalecimiento Institucional del CIEP.
Fuente: Expansión