
El edadismo en México: una barrera para la empleabilidad de adultos mayores
Cumplir años, un proceso natural y humano, puede convertirse en el mercado laboral en un obstáculo para conseguir empleo. En México, el edadismo es un fenómeno marcado que sitúa al país entre las economías de la OCDE con menor participación de personas mayores en el mundo laboral.
Según el informe Perspectivas de empleo de la OCDE 2025, México ocupa el cuarto lugar dentro del organismo con la tasa de empleo más baja (73.4%) en el grupo de 45 a 54 años, solo por detrás de Colombia, Costa Rica y Turquía, y lejos del promedio global (80.1%). Aunque la ocupación en los rangos de 55-59 y 60-64 años ha aumentado en las últimas dos décadas, solo este último grupo supera el promedio de la OCDE.
El organismo destaca que, al tener una participación laboral inferior en el rango de 45 a 65 años, México tiene margen para extender la vida laboral activa de esta población.
Discriminación y brechas en el empleo
El estudio Tendencias de Talento 2025 de PageGroup revela que el 38% de las personas ha sufrido discriminación por edad en el trabajo, siendo esta la principal causa de trato injusto laboral. La OCDE atribuye la baja contratación de adultos mayores a los prejuicios de los empleadores, quienes suelen percibirlos como menos adaptables y con menor competencia tecnológica.
Pero el desafío no se limita al edadismo: la brecha de género también es un problema. La OCDE señala que, con una diferencia de casi 30 puntos porcentuales en empleo entre hombres y mujeres, México tiene un potencial desaprovechado al no integrar plenamente a las mujeres en edad laboral.
Impacto económico de la inclusión
Ambos grupos —adultos mayores y mujeres— son clave para el crecimiento. El informe estima que si México reduce dos tercios de su brecha de género y aumenta la participación laboral de los mayores, el PIB per cápita podría crecer un 0.41% anual. Si además se eleva la productividad al promedio de la OCDE (1991-2000), el incremento podría llegar al 1.55%.
Desempleo bajo, pero persistencia de informalidad
México mantiene una de las tasas de desempleo más bajas de la OCDE, aunque más de la mitad de los trabajadores sigue en la informalidad. La organización prevé que el bajo desempleo y la reducción de la inflación impulsen el consumo y la estabilidad laboral, pese al bajo crecimiento económico proyectado para 2025.
Salarios al alza
Los salarios reales muestran una tendencia positiva, con un aumento acumulado del 1.7% desde 2021. Destaca especialmente el incremento del salario mínimo: entre enero de 2021 y enero de 2025, este subió un 56.7% en términos reales, el mayor avance en la OCDE y muy por encima del promedio del 8.8%.
En resumen, México enfrenta el reto de combatir el edadismo y la brecha de género para aprovechar el potencial económico de estos grupos, mientras consolida mejoras en empleo y salarios.