
En México, las ciberestafas contra adultos mayores han aumentado un 20% en los últimos años, afectando al menos a tres personas de este grupo diariamente, según alertaron especialistas.
La combinación de desconocimiento tecnológico, soledad y falta de acompañamiento digital y emocional eleva su vulnerabilidad, especialmente ante la creciente digitalización de trámites y servicios.
Pablo Corona, presidente de la Asociación de Internet MX y experto de NYCE México, explicó que los estafadores explotan la necesidad de interacción de los mayores, haciéndose pasar por instituciones, familiares o empresas confiables para obtener datos personales o dinero.
Los métodos han evolucionado más allá de las llamadas telefónicas: “Es común recibir mensajes falsos que simulan notificaciones urgentes de mensajería o compras”, advirtió Jazmín Camacho, gerontóloga de Koltin.
Señaló que la soledad crónica y la falta de una red emocional llevan a los adultos mayores a buscar interacción, incluso con desconocidos, aumentando su susceptibilidad a estafas románticas o mensajes que apelan a la empatía.
“Sin soporte emocional, confían en información no verificada y no reconocen señales de alerta en internet”, afirmó.
Los expertos recomiendan identificar interlocutores en llamadas sospechosas, verificar si se solicitó un servicio y fomentar la inclusión digital de los mayores con el apoyo de un familiar o especialista.
También sugieren educarlos sobre cómo evitar estafas, como no compartir datos sin consultar.
Según el Consejo Nacional de Población (Conapo, 2025), México tiene 17.1 millones de adultos mayores, que representan el 12.8% de la población, un grupo especialmente vulnerable a estos delitos.