La mayoría de los trabajadores en México prefiere apoyarse en sus familiares y amigos para su búsqueda de empleo. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), las redes personales se mantienen como la vía principal para encontrar un trabajo, así lo considera el 56% de la fuerza laboral subordinada del país.
Las redes familiares, de amigos y conocidos siguen siendo el medio más usado para buscar empleo por la agilidad, opina Gabriela Pérez Almendariz, CEO de Livec Capital Humano. “Puede ser muy rápido, porque es como vender un servicio, lo compartes con tus amigos, tu familia o vecinos y seguro alguien lo va a requerir. En vez de tardarte cuatro meses en colocarte, tal vez tardas la mitad”.
Al menos en los últimos cinco años, la búsqueda de trabajo a través de contactos personales se ha mantenido en el primer lugar entre las preferencias de las personas, incluso en la pandemia se observó un ligero repunte en este renglón, de acuerdo con las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Para Yoani Aceves, directora ejecutiva de Talenca para Latinoamérica, este comportamiento también está vinculado con el impacto emocional del proceso. “Buscar empleo nos genera ciertas emociones y para combatir la ansiedad y el rechazo, nos refugiamos en el círculo cercano que nos da confianza y nos darán referencias reales de su trabajo. También podemos tener conexiones cercanas con empresas donde han trabajado nuestros familiares”.
A decir de la especialista, las redes personales pueden facilitar una inserción o reinserción rápida al mercado laboral, pero la búsqueda se limita y esto puede afectar la carrera del candidato.
“Cuando no buscamos en otra parte, no tenemos más opciones en empresas, en sueldos o estilos de trabajo. En una afectación más radical, si en el núcleo cercano no hay vacantes, la persona puede percibir que no hay oportunidades laborales y se refugia en la informalidad”, expone.
Además de esto, agrega, limitar el proceso al círculo cercano puede derivar en generaciones completas en un mismo rol y centro de trabajo, sin un crecimiento laboral entre padres e hijos, por ejemplo.
En un aspecto positivo, comenta Gabriela Pérez Almendariz, las recomendaciones familiares y de amigos se llegan a traducir en el acceso a mejores puestos de trabajo y salarios, aunque esto depende del rol que tenga el familiar o amigo en una empresa. “La posición de tu conocido sí puede ser una ventaja, y por eso también es más fácil y cómodo acudir con las personas allegadas”.
Las especialistas en reclutamiento coinciden en que lo ideal es ampliar las vías para encontrar un trabajo. Comunicar entre el círculo cercano no es mala idea, pero la búsqueda debe extenderse a medios formales, como las bolsas de empleo, las agencias de colocación y las aplicaciones especializadas.
Empatía y seguimiento, los pendientes
Yoani Aceves considera que los medios formales para buscar trabajo no han superado las redes personales por una falta de atención personalizada o criterios de restricción que aún se encuentran en las vacantes difundidas en algunos canales.
A esto hay que sumar que la figura de Recursos Humanos mantiene el estigma de ser un área que sólo rechaza y “no te regresa la llamada o no te habla claro”, agrega la especialista.
De acuerdo con el estudio Búsqueda de Empleo por Internet de la Asociación de Internet MX, los candidatos consideran que una plataforma para buscar trabajo es efectiva cuando:
- Notifica ofertas de trabajo relevantes
- Las empresas comparten vacantes de calidad
- Es fácil encontrar empleos relevantes
- Hay una gran cantidad de ofertas de trabajo
“A veces el cliente se tarda mucho en decidir la contratación, en dar respuesta. Desde que se le notifica al candidato que está en la última etapa, la empresa puede tardar hasta un mes en tomar la decisión, y cuando esto llega, el candidato ya encontró trabajo en otra parte. Desafortunadamente los procesos son lentos y en ocasiones ni siquiera hay una respuesta de que no fuiste aceptado y el candidato queda en el limbo”, señala Gabriela Pérez.
En este sentido, las especialistas indican que los canales formales para buscar empleo tendrán un mayor uso en la medida que los procesos se agilicen, la comunicación con los candidatos sea transparente y empática, y se cuente con un buen proceso de seguimiento.
Fuente: El Economista